“Mi visión era crear una academia de dibujo y pintura para enseñar a los niños y jóvenes de Apastepeque”. Así resumió su sueño Cándido Pineda, quien en 1988 abrió el taller de pintura “Simiente”, que aún sigue formando generaciones de artistas plásticos.
El próximo 15 de diciembre, en la Casa de la Cultura de Apastepeque, en San Vicente, Pineda celebrará los 30 años del taller pintura, junto con sus alumnos y otros allegados.
Recién fundado, al taller sólo asistían cinco jóvenes y las clases se impartían en un reducido espacio. En la actualidad, el grupo se compone, en promedio, de 20 alumnos entre niños y jóvenes.
“Recuerdo que visitaba muchas exposiciones, leía sobre personajes que pintaban; eso fue despertando en mí el deseo de pintar hasta que un día tomé la decisión de practicar y practicar. Ahora comparto con mis alumnos esa hermosa experiencia de la pintura”, dijo el artista.
En 1986, luego de obtener su profesorado, el Ministerio de Educación nombró a Pineda como profesor de Educación Estética y lo asignó a la escuela Agustín Sánchez y al tercer ciclo de la localidad, sin embargo renunció a la plaza para dedicarse a la pintura.
“No me quedaba tiempo para pintar mis propias ideas”, explicó el apastepecano; pero antes de dejar las aulas les dijo a sus alumnos que si alguien quería seguir recibiendo las clases de dibujo y pintura podía llegar a su casa, solo pedía alguna colaboración la cual utilizaba para comprar material para impartir las clases, con el objetivo de que los alumnos mantuvieran el entusiasmo por pintar.
“Tuve que administrar bien el tiempo para enseñar y para seguir trabajando con mis obras”, explicó el artista plástico.
La academia “Simiente”, nombre originado de la palabra semilla, ha sido un lugar de aprendizaje para muchas personas en las últimas tres décadas; algunos alumnos lograron dominar la técnica y otros se dedicaron a forjarse una carrera universitaria.
“Cándido me ha apoyado en la parte artística y en mi vida; él me acogió en su taller y gracias a su apoyo y a la de un familiar que me paga la universidad, ya cursé tercer año de diseño gráfico”, agradeció Kevin Alejandro Chopin, quien tiene tres años de recibir clases de pintura.
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Las obras fueron esculpidas por el apastepecano José Sabas, usando una motosierra.
Otro de los alumnos que se ha beneficiado con el taller es David Pineda Rodríguez, quien tiene cinco años de estar en el taller. Actualmente estudia en el CENAR y da clases de dibujo y pintura en la casa de la cultura de San Vicente.
José David Pineda, con nueve años de trabajar junto con el profesor Pineda, ha creado siete lienzos y en el 2014 expuso la obra “Cautivo”, junto a las pinturas de su tutor. La exhibición fue en el Museo Histórico del Peñol, en Colombia.
Además, tiene otras obras que fueron expuestas en Francia, España, Inglaterra e Italia.
A Reyna Hernández, de 49 años de edad, desde niña le ha gustado la pintura porque le ayuda a relajarse. A través de la pintura “puedo liberar mis pensamientos, todas mis pinturas están colgadas en mi casa”, contó la alumna del taller.
Otro de los apastepecanos que ha pasado por las lecciones de Cándido es Francisco Javier Jiménez, quien también ha aprendido de forma empírica.
“El arte entra por los ojos y desde que vi a los chicos trabajar, yo me sume al grupo. Cándido me ha apoyado mucho, me orienta como es la teoría del arte.
Pintar me distrae, se me olvidan los problemas es como una salud para el espíritu, nunca es tarde para crecer”, expresó Jiménez.
Entre sus alumnos también se puede contar a Dolores Abigaíl Mira palacios, estudiante de Licenciatura en Trabajo Social en la Universidad Multidisciplinaria paracentral de la UES en San Vicente; ella comentó que su padre fue alumno del taller, como ella lo es ahora.
“Mi papá siempre me motiva a que no falte a las clases de pintura, me da algunos tips y en ocasiones observo como él pinta. La verdad el pintar y dibujar da destreza, inspira y ayuda a sentirse más libre”, dijo la universitaria.
A pesar de la dificultad en uno de sus ojos, Cándido Pineda mantiene ese espíritu de enseñanza. “He sembrado una semilla en cada uno de ellos para que la transmitan a otras generaciones, he dejado esa huella en las diferentes aulas de estudio del municipio de San Vicente, como de Santo Domingo, San Lorenzo, Zacatecoluca, Apastepeque y espero que cada uno de ellos multipliquen ese trabajo y lo lleven a sus comunidades”, declaró.
Las puertas de la Casa de la Cultura de Apastepeque estarán abiertas al público el sábado 15 de diciembre, para que los lugareños y turistas puedan apreciar la exposición; los cuadros son tanto de Cándido Pineda , como de sus discípulos.
Las obras del Pineda se han expuesto en el Museo Arte Moderno y en el Instituto de Arte y Cultura INCUT Bucaramanga, en Colombia.
Además, formó parte de un grupo de 150 pintores de los cuales 50 fueron elegidos para la publicación del libro Hispanoamericanos Traveling Souls (almas viajeras) del período 2012-2013.
