Rina Membreño, de 52 años, es madre de siete hijos; de ellos, tres nacieron con discapacidad auditiva. Asegura que cuando su tercera hija nació, ella se preocupaba porque la niña no hablaba, algo que los médicos que le atendieron lo veían como una exageración de parte de la madre. Sin embargo, las audiometrías realizadas confirmaron los temores de Rina: la niña no escuchaba.
“Yo los llevaba a control de niño sano con sus vacunas y nunca me dijeron un porqué, o ‘los vamos a poner en tratamiento’, nada. Existe una despreocupación y aún más grande diría discriminación. En una ocasión un doctor me dijo que los niños especiales son un estorbo, yo sentía como que me mataban… A veces con niños especiales siempre se tiene esa cruz por el maltrato en la sociedad, hospitales y aun en las escuelas especiales”, comenta Rina.
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Felizmente, todos los hijos de Rina son bachilleres, incluyendo a Adriana (27 años), Juan Carlos (22) y Marcela (18), quienes nacieron con discapacidad auditiva y aspiran continuar estudios universitarios.
Recientemente la Alcaldía Municipal de San Miguel, la Asociación Intersectorial para el desarrollo económico y progreso social (CIDEP) y la Liga Española de la Educación y la Cultura Popular (LEECP) presentaron los resultados del Diagnóstico de niñez y adolescencia con discapacidad del municipio de San Miguel 2021. Este detalla que 201 estudiantes con discapacidad son atendidos en tres escuelas de educación especial que funcionan en el municipio de San Miguel, mientras que 181 forman parte del sistema regular de educación, y 11 se encontraron fuera del sistema educativo.
En el estudio aclaran que los 393 estudiantes reportados no agotan la población discapacitada inscrita en los centros y escuelas del municipio, pues solo se reportan los que tienen edades entre dos y 17 años.
Este y otros datos que revelan la calidad de vida de las personas con discapacidad en el municipio de San Miguel se muestran en el diagnóstico, que recopila toda la información proveniente del Ministerio de Educación, Salud, las instituciones o asociaciones que trabajan con niños y niñas que tienen discapacidad.
“Se elaboró sobre la lógica de ver qué compromiso se puede obtener de las instituciones para abordar el tema, para trabajar con niños y niñas con discapacidad, aunque son pocas las instituciones que trabajamos o que nos interesa este sector de niños que de alguna manera se ven limitados por una serie de condiciones y de posibilidades para poder desarrollarse”, comentó Carlos Soriano, coordinador de CIDEP en la zona de oriente. Soriano agrega que espera que la municipalidad asuma un cierto protagonismo, ya que la información revelada en el diagnóstico “le servirá para poder generar algún tipo de inversión pública a partir de un porcentaje de su presupuesto”, aunque reconoce que “no está obligada hacerlo” ya que existe una ley de personas con discapacidad, pero también “esa ley les puede permitir argumentar la inversión que puedan tener desde la municipalidad u otra institución” apunta.
Luis Rivera, jefe de gestión y cooperación de proyectos estratégicos de la Alcaldía de San Miguel, dijo que utilizaran el Diagnóstico de Niñez y Adolescencia con Discapacidad del municipio de San Miguel 2021 para respaldar proyectos y gestionar apoyos.
“Es un área olvidada por múltiples sectores y queremos ser pioneros en desarrollar proyectos que vayan en beneficio para este sector”, dijo; sin embargo agregó que aún se encuentran en la etapa de planes de acción, y que “es prematuro hablar de proyectos específicos que vayan acompañados del diagnóstico”.
Hace tres años, Rina Membreño formaba parte de una asociación de personas con discapacidad. Recuerda que le solicitaron al exalcalde Miguel Pereira un espacio para reunirse como asociación, y que les permitieran capacitar personal que labora en la municipalidad para atender a personas con discapacidad auditiva o de otra índole, o contar con una persona de este grupo de población para atender a sus pares.
“Pero nada. Yo creo que en todos los lugares públicos es necesario una persona con discapacidad. Por ejemplo, mis hijos son bachilleres, ellos pueden usar una computadora y son capaces, porque ellos lo único que no pueden es sacar su voz, pero sí pueden comunicarse… A la gente le encanta ver comunicarse a un sordo, con las señas, pero aprenderlo y enseñarlo es un costo grande, es caro. Porque aun las maestras de las escuelas especiales no saben mucho”, comentó Rina. Debido a que el diagnóstico se desarrolló dentro del gobierno municipal anterior, CIDEP está buscando establecer una reunión con el actual alcalde Will Salgado, para presentar resultados. Además existen otros documentos pendientes que tienen que ser aprobados por el Concejo Municipal de San Miguel.
DATOS IMPORTANTES
En 2020 fue aprobada la Ley Especial de Inclusión de las Personas con Discapacidad, que busca proteger y garantizar los derechos económicos, sociales, civiles y políticos de las personas con discapacidad.
Según el diagnóstico en el municipio de San Miguel, solo en 14 de los 136 centros escolares regulares consultados se identificaron docentes que dominan LESSA (Lenguaje de Señas Salvadoreñas). En total son 18 docentes: cinco laboran en centros del sector rural, 13 en centros escolares urbanos, uno trabaja con el sector privado.
En cuanto al manejo del sistema Braille, solo cinco centros cuentan con docentes que lo manejan. Son ocho docentes: seis ubicados en la zona rural y dos en la zona urbana. De estos, uno trabaja en el sector privado.
Entre el 1 de enero de 2020 y el 31 de diciembre de 2020 el CRIOR-ISRI San Miguel reportó 1,595 consultas. El 43% (687) población femenina de los diferentes grupos etarios y el 57% (908) población masculina. Los reportes incluyen a población atendida por primera vez y subsecuente, de todas causas que generan o no discapacidad, atendidas con y sin referencia. La población de cero a 17 años representó el 72.5% de las atenciones.