Esperanza, la yegua atropellada el 30 de agosto en Santa Ana, será sacrificada, evaluaciones realizadas por los veterinarios que la atienden revelaron “daño en el bazo, riñones, anemia y más”.
De acuerdo con información compartida vía Twitter por el ministro de Agricultura y ganadería, Pablo Salvador Anliker, la idea era someter al ejemplar a una a cirugía para colocar una prótesis en lugar de su pata amputada, sin embargo los análisis previos no fueron alentadores.
“Ya teníamos comprada la prótesis, pero lastimosamente órganos vitales están comprometidos, no la queremos hacer sufrir y por eso se le aplicará una eutanasia digna”, escribió en esa red social el funcionario.
Además, Anliker sostuvo “No podemos seguir dejando que animales sean maltratados y mueran a causa de los malos “dueños”. ¡Vamos a castigar por la vía legal a toda persona que abandone o maltrate a un animal!. Según ley deberán pagar más de $1,200″.
El ministro detalló que para hacer efectivas las sanciones, echarán a andar “Proyecto Esperanza” (en memoria de la yegua), que será una mesa de trabajo en pro del bienestar animal, a la cual serán invitadas entidades rescatistas.
Los últimos días de vida de Esperanza
La yegua fue arrollada sobre la carretera entre Santa Ana y Antigua San Salvador, en aquel momento personas e instituciones altruistas le brindaron auxilio. Se sumaron socorristas y la alcaldía de la localidad.
Por lo complicado de las lesiones (pata trasera fracturada) y los cinco meses (aproximados) de preñez del animal, el personal del Ministerio de Agricultura y Ganadería, MAG, se hizo cargo del caso.
El 31 de agoto le fue amputada la pata dañada durante el accidente.
El 2 de septiembre, el dueño de Esperanza la reclamó, el animal permanecía en observación en el rastro municipal; sin embargo, las autoridades del lugar decidieron no entregarla y argumentaron que seguirían mecanismos legales para decomisar el animal. .
El 6 de agosto se conoció que Esperanza había comenzado labor de parto, horas más tarde se supo que la cría nació muerta, los veterinarios sostuvieron que el golpe comprometió la vida del nuevo equino.