Una mujer y madre de cuatro niños perdió la vida en la selva central de Perú, tras haber sido envenenada y secuestrada presuntamente por su pareja, informaron hoy medios locales.
La víctima, identificada como Sandra Medina Avilés, de 38 años, murió el pasado jueves en el distrito de Aucayacu, de la provincia de Leoncio Prado, en la región de Huánuco, tras una agonía de 15 días, tiempo en el que su pareja, de 18 años, presuntamente la mantuvo secuestrada en la vivienda de ambos y forzada a beber veneno.
Según aseguraron los vecinos de la pareja a medios locales, ambos mantenían una relación tormentosa debido a los celos.
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La víctima temía que la discusión se hiciera más grande por lo que escondió el teléfono con la cámara encendida. Mientras el caso es investigado por la Fiscalía, al atacante le fueron decretadas medidas de restricción.
De confirmarse la hipótesis policial, Medina Avilés, quien llegó en estado grave el mismo jueves al centro de salud de Tingo María, se convertiría en la sexta víctima de la violencia machista en el país.
Solo el año pasado este flagelo se cobró la vida de 149 mujeres, según cifras del Ministerio de la Mujer; en tanto que al menos 140 niños y adolescentes quedaron huérfanos y otros 9 menores murieron, tras los feminicidios de sus madres.
Las alarmantes cifras de la violencia machista en el país llevaron a que el mandatario Martín Vizcarra considere la lucha contra la violencia de género como uno de sus principales objetivos del 2019.
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La PNC ha iniciado una campaña de atención y denuncia para contrarrestar ese delito.
Por su parte, la nueva fiscal general de Perú, Zoraida Ávalos, señaló al asumir su cargo que ordenará un diagnóstico del estado actual de las fiscalías especializadas en violencia contra la mujer, con el objetivo de dar “una respuesta real y concreta a esta problemática latente”.