Bien dicen que siempre hay un salvadoreño que destaca en cualquier rincón del mundo. En Como, Lombardía, hay un León que volvió al cuadrilátero y que sueña con competir a nivel olímpico. Se trata de Douglas León, un chico de 23 años nacido en Italia pero hijo de padres cuscatlecos que migraron por la guerra local. Tiene la doble nacionalidad.
Su historia es curiosa porque en realidad se forjó en el baloncesto, al que jugó desde los 6 hasta los 16 años. Formó parte de selecciones regionales juveniles del norte de Italia.
Paralelamente, siempre se ejercitaba, iba al gimnasio y corría. Su compañero de deportes hacía boxeo, y, un buen día, lo invitó a ponerse los guantes. “En el último equipo en el que hice baloncesto, solo lo hacía por jugar, no me entusiasmaba tanto ya. Mi maestro de boxeo me ayudó mucho, me dijo que tenía buenos fundamentos, reflejos, buenos movimientos de piernas y, que si quería, podía empezar poco a poco en alguna pelea, ya que sabía que mi objetivo era ser protagonista, y así me dieron ganas”.
De sea forma tuvo en 2014 su primer pelea. Pero fue decepcionante. Perdió. La segunda tampoco le fue bien y se amargó, pero sus ganas de hacer deporte lo llevaron a intentarlo una vez más. “Desde la tercera comencé a ganar”, cuenta.
Para entonces, ya tenía 18 años y buscó cómo ganarse la vida. Entrenaba pero trabajaba haciendo pizzas. Ese año tuvo unas seis peleas, recuerda, y solamente perdió una.