La utilización de los zapatos en los niños es recomendable hasta que comienzan a caminar, incluso cuando gatea, para proteger sus pies. Mientras no lo haga, lo ideal es que use calcetines o zapatos muy cómodos para bebés.
Elegir el zapato adecuado no es cuestión de moda, tendencias y estilo, es más una decisión de compra pensando en la comodidad, sobre todo, si recién comienza a caminar.
Estas son las siete consideraciones que debes tener presente, según plantea Guía Infantil:
1. De cuero: es imprescindible que el primer zapato sea de cuero, porque es un material flexible y además permite que el pie transpire correctamente.
2. Horma del zapato: cuando compres un zapato evalúa si la horma es amplia y flexible en la para que el niño tenga libertad de mover sus dedos dentro del calzado.
3. Material blando: en la parte de adelante conocida como empeine, es recomendable verificar que sea de material blando para que el niño no se haga rozaduras o heridas en el pie.
4. La suela: preferiblemente escoge una suela antideslizante y flexible, recuerda que el niño aún está aprendiendo a caminar.
5. Altura del zapato: antes se creía que los niños que comienzan a caminar deben utilizar botas, sin embargo, expertos puntualizan que la altura del zapato no debe sobrepasar el tobillo, para un mejor movimiento.
6. Zapatos cómodos: no sacrifiques la comodidad de los pies y los pasos de tu pequeño, los zapatos deben ser ligeros para facilitar el caminado al niño.
7. La talla: para que el niño use un zapato cómodo lo ideal es que, entre el dedo más largo de su pie y el zapato, se tengan una separación de 1.5 centímetros. Nunca le compres zapatos de una talla más grande porque se le complicará dar pasos seguros, tampoco zapatos muy ajustados porque lastimará sus dedos.